Nunca he sido de estrellas ni de horoscopos ni de energías que me determinen el futuro o lo que viene. Lo mío es más de momentos, o de inspiraciones si se quiere y para mi ese origen esta en Dios y su preponderante y relevante presencia en mi vida.
Hoy siento que es uno de esos momentos. Mi trabajo tiene muy intersantes desafíos pero así también mi espiritu profesional quiere cosas nuevas. La familia y su crecimiento me han llevado a considerar nuevas opciones y desafíos. Las etapas hay que quemarlas y siento que hoy puede ser un buen día para empezar a soñar nuevas realidades y para trabajar en que se concreten.
No tengo nada concreto hoy, fuera de un fuerte sentimiento que crece a diario. Y quizás eso es mas real que cualquier certeza